Nueve años después de la adquisición de Travisoft, la inversión del Grupo Volaris en el desarrollo del talento ha demostrado ser un gran impulso para la trayectoria profesional de Debra Dallmeyer.
La carrera de Debra Dallmeyer la ha llevado a lugares que no imaginaba posibles antes de unirse a Volaris. Ahora es Directora General de Travisoft, donde supervisa el funcionamiento de la empresa de software, un salto impresionante desde un puesto anterior, hace casi una década, como Directora de Administración de Travisoft. A continuación, le preguntamos por su experiencia en la adquisición de empleados y por qué Volaris podría ser la opción adecuada para muchas empresas de software que buscan ofrecer nuevas oportunidades a su personal.
¿Qué hacías antes de unirte a Volaris?
Yo era la Directora de Administración de Travisoft cuando Volaris nos adquirió, y en ese papel de «Juana de todos los oficios», desempeñé diversas responsabilidades, incluida la supervisión de algunos procesos empresariales y de marketing. También me encargaba de las cuentas por pagar y por cobrar, el inventario, la gestión de la oficina, los informes financieros, las nóminas y las prestaciones. Solía decir que si no teníamos una persona para ello, ¡lo hacía yo!
¿Cuáles fueron tus experiencias tras la adquisición?
Como antes me dedicaba al marketing, tras la adquisición decidí pasar a la parte de ventas y marketing. Pudimos participar en el cambio de marca e implantar la automatización del marketing, que fue una experiencia muy divertida. Hicimos madurar el departamento de ventas y marketing tras la adquisición. Esto fue posible gracias a que el equipo de marketing de Volaris vino, organizó talleres con nosotros y debatió cómo podíamos llevar el conocimiento de nuestra marca y el marketing al siguiente nivel.
¿Qué transformaciones empresariales observaste en Travisoft tras la adquisición?
Han pasado unos nueve años desde que fuimos adquiridos inicialmente. He visto en general una mayor madurez en nuestros procesos, como ver a nuestro equipo de atención al cliente pasar de tomar tickets y responder preguntas de soporte a implicarse más en el desarrollo de las relaciones con los clientes. Antes de la pandemia, hacíamos visitas in situ con nuestros clientes, mientras que antes de formar parte de Volaris, no. Hemos podido participar en ferias y conferencias. Volaris nos anima a desarrollar nuestros equipos, por lo que todos nuestros equipos tienen presupuestos de formación para que podamos ofrecer oportunidades de crecimiento y desarrollo.
Has experimentado un crecimiento profesional excepcional durante la última década. ¿Qué ha contribuido a ello?
Hay un par de razones por las que he podido pasar de Directora de Administración, a Directora de Ventas y Marketing, y ahora a Directora General, y una gran parte de ello son fundamentalmente los valores de Volaris. A Volaris le apasiona construir sus equipos, construir líderes y dar oportunidades a la gente. Pude captar algunas de esas oportunidades después de varios años de formar parte de una gran empresa. También tuve grandes jefes que me dieron excelentes comentarios, que creyeron en mí y me dieron oportunidades de crecimiento. La otra cara de la moneda, por supuesto, es que cuando llegan las oportunidades, hay que trabajar duro para aprovecharlas y sacarles el máximo partido.
Cuando te dan una nueva oportunidad, siempre hay algo de desconocido. Hay curvas de aprendizaje. Pero en Volaris hay cientos de personas dispuestas y esperando para ayudarte a crecer. Esa parte de Volaris es una gran ventaja, ya que tienes amplias oportunidades de establecer contactos en los que puedes aprender de gente que ya ha hecho lo mismo que tú.
¿Qué le dirías a las empresas que están pensando en unirse a Volaris?
Va a dar oportunidades a tu negocio, a tus equipos y a tu gente. No creo que hubiera tenido las mismas oportunidades en otro sitio. Cuando se construye un negocio, hay mucho trabajo detrás -mucho orgullo, muchas noches largas- y quieres un hogar y un lugar para ese negocio que valore todo el trabajo que has invertido en él durante décadas. Eso es lo que hace Volaris: honra lo que se ha hecho en el negocio y estudia cómo puede llevarlo a nuevas cotas. Gran parte de cómo lo hacen es invirtiendo en las personas que trabajan en esas empresas.
